Identifica Contraloría más 10 mil obras irregulares
Dependencia instaló módulos para quejas y denuncias.
La Secretaría de Contraloría, liderada por Álvaro Bardales, expuso la realidad del rezago en obras, con más de 10 mil proyectos sin recepcionar al inicio de la actual administración.
Tras un arduo proceso, que duró 15 meses, la mitad de estas obras fueron finalmente revisadas y aceptadas, marcando un cambio en la gestión y revisión de infraestructuras municipales.
En septiembre de 2022, la Contraloría detectó un preocupante rezago, revelando la existencia de miles de obras sin revisión ni garantía de calidad para los ciudadanos de los 84 municipios del estado.
De esa forma, la revisión exhaustiva de proyectos ejecutados entre 2016 y 2022 permitió identificar si los trabajos cumplían con los estándares establecidos y los términos de los contratos.
Cabe mencionar, qué, la dependencia logró formalizar la entrega-recepción de casi el 50 por ciento de las obras rezagadas, lo cual representa un logro significativo, superando en más del doble los resultados de las dos administraciones anteriores.
Sin embargo, el organismo también destaca la identificación de numerosas obras no aptas para este proceso, señalando deficiencias, incumplimientos de metas y presuntas irregularidades que en su momento fueron comunicadas a los Órganos Internos de Control y autoridades investigadoras municipales.
Como medida preventiva ante posibles actos ilícitos, la Contraloría implementa capacitaciones constantes para las direcciones de Obras Públicas de los municipios, abordando temas cruciales como la elaboración de expedientes unitarios, protocolos de entrega-recepción, manejo de recursos propios y recomendaciones para el uso de bitácoras electrónicas de obra, entre otros.
En un último llamado, las administraciones municipales tienen hasta el 31 de diciembre para recepcionar las obras rezagadas.
De lo contrario, se iniciarán procesos de responsabilidades administrativas correspondientes, subrayando la determinación de la Secretaría para poner fin al rezago y garantizar la calidad de las infraestructuras.