Abogado defraudador
Redacción
Indignante caso el ocurrido en la localidad de Buenavista perteneciente el municipio de Huejutla donde un supuesto abogado el cual presuntamente también era empleado de la presidencia defraudó con la cantidad de $17,000 a una familia que solicitó sus servicios para liberar a una jovencita que se encontraba bajo custodia del DIF Estatal.
Según la información proporcionada por la señora Basilia H. H. todo ocurrió hace un par de meses cuando una menor de edad de la misma comunidad huyó de su casa debido a que ahí era maltratada por su progenitora, se trasladó hasta la ciudad de Monterrey.
A su arribo al estado del Norte la joven comenzó una relación con el hermano de la señora Basilia, sin embargo, en su comunidad comenzaron a emitir la alerta por su desaparición.
Al cabo de unos días la joven fue localiza y elementos de la Fiscalía de Nuevo León realizaron su aseguramiento así como el de su pareja, el cual fue puesto a disposición de las autoridades por la desaparición de la menor.
Al rendir su declaración la joven informó que el sujeto nada había tenido que ver con que ella huyera de su casa, afirmó que ella tomó la decisión de irse porque sufría constantes maltratos físicos y psicológicos por parte de su madre por lo que decidió huir.
Ante esta situación el joven salió en libertad, sin embargo debido a lo relatado por la menor fue canalizada por las autoridades policiacas a las instalaciones del DIF en la ciudad de Huejutla, mientras se realizaban las investigaciones correspondientes.
Al cabo de unos días la menor fue enviada al DIF Estatal a la ciudad de Pachuca donde presuntamente iba a permanecer hasta cumplir la edad de 18 años, ante esta situación la familia del novio comenzó a movilizarse para que la dejaran salir firmando ellos como responsables.
Al no haber un vínculo directo los hermanos de la pareja de la joven buscaron asesoramiento legal cayendo en manos de un supuesto licenciado de nombre Ángel Amador Hernández, personaje en el que confiaron ya que se los había recomendado un familiar directo.
El licenciado al entrevistarse con ellos les dijo que el caso era complicado pero que él podía sacar a la joven sin que tuviera que esperarse hasta cumplir la mayoría de edad, pero que obviamente necesitaría recursos económicos para poder movilizarse ya que iba a hacerlo desde arriba pues estaba muy bien parado en el Gobierno del Estado incluso hasta les mostró supuestas conversaciones que él tuvo con el gobernador Julio Menchaca.
El sujeto les solicitó la cantidad de 25 mil pesos, sin embargo, la señora Basilia le dijo que no podía darle la cantidad de golpe que le daría la mitad y cuando el mostrara el avance en el caso le daría el resto del dinero, sin embargo, el tiempo transcurría y no había ningún avance.
Después de unos días Ángel A. les pidió más dinero y la señora Basilia depositó la cantidad de 5 mil pesos más dando un total con la ya anteriormente depositado de 17 mil pesos.
Posteriormente el abogado se volvió a contactar con la señora Basilia para entregarle una supuesta carta escrita por la joven en la que pedía que le depositarán al licenciado la cantidad de 13 mil pesos más pues dentro de donde se encontraba necesitaba algunas cosas además que ella quería ya salir y el abogado necesitaba el recurso para agilizar el trámite.
Sin embargo, al leer la carta se percataron que la letra no coincidía con la de la joven pero si con la del abogado por lo que al desconfiar de esta decidieron encarar al litigante quien solo daba evasivas y posteriormente dejó de responder.
Ante esta situación los afectado comenzaron buscarlo y para pedirle que les devolviera el dinero pues nunca hizo nada para sacar a la joven del DIF, sin embargo el sujeto comenzó a portarse agresivo con ellos hasta el punto de amenazarlos si continuaban pidiéndole el dinero.
Cabe destacar que días después la abuela de la joven logró que haciéndose cargo ella de la menor el DIF se la entregara y de ese modo volviera a su hogar.
Al entrevistarse la señora Basilia con la menor confirmó que la carta no la había escrito ella, así como que el abogado tampoco la había ido a ver para los trámites de su liberación como él les había dicho.
Ante esta situación los afectados decidieron dar a conocer el hecho pues según se informaron no es la primera vez que Ángel A. en complicidad con su cónyuge realizan este tipo de fraudes, por lo que refirieron que si bien saben que el sujeto no va a regresarles el dinero al menos la gente sepa cómo operan estos individuos para que estén alertas y no caigan en sus engaños.