Redacción
Este fin de año, Zimapán invita a quienes desean pasar las fiestas decembrinas entre magia y diversión, siendo un pueblo encantador que ofrece una experiencia única a sus visitantes.
En el corazón de Zimapán, se encuentra la parroquia de San Juan Bautista, con una arquitectura barroca exquisita del siglo XVI, y que es una visita obligada en este Pueblo Mágico.
Sus fachadas ornamentadas y detalles artísticos ofrecen una ventana al pasado, fascinado a aquellos que aprecian la riqueza arquitectónica.
Por otra parte, las grutas de Xahjá y el Cañón del Infiernillo, proporcionan un escenario único que invitan a despedir el año de una manera inolvidable, ya que ofrecen la oportunidad de hacer senderismo y exploración, brindando así momentos de tranquilidad, lejos del bullicio.
En Zimapán se puede encontrar comida que se vuelve una delicia para el paladar. Los mercados locales son un tesoro culinario para quienes visitan, pues aquí es posible degustar un típico tamal dulce relleno de mermelada, o enchiladas de chile rayado.
Aquí convergen la historia, naturaleza, gastronomía y festividades para ofrecer a sus visitantes una celebración de fin de año llena de encanto y diversidad, como destino inigualable para recibir el 2024, con mucha alegría de explorar y descubrir sus grandes tesoros.