El uso del teléfono móvil ha crecido de manera exponencial en los últimos años, ahora son nuestros compañeros de vida en el ámbito laboral, social, lúdico e incluso familiar, sin embargo, un uso excesivo puede generar problemas de dependencia, adicción y miedo a lo cual se le conoce como nomofobia siendo ya niños y niñas de entre 8 a 11 años de edad de la zona Media, diagnosticados con este mal.
Especialistas señalaron, que la nomofobia representa el miedo irracional a estar sin teléfono móvil, la dependencia al dispositivo electrónico provoca una infundada sensación de comunicación en el usuario que no dispone del aparato, ya sea porque se lo haya dejado en casa, se haya agotado su batería o esté fuera de cobertura.
Manifestaron, que detectaron en Rioverde situaciones de ansiedad en menores si no podían disponer de su móvil para "seguir en contacto" con su círculo, los especialistas,