A causa de las elevadas temperaturas que superan los 41 grados centígrados, comensales o clientes denunciaron que, en varios restaurantes, cocinas económicas, fondas y loncherías, la comida se descompone fácilmente y así la venden causando riesgos de enfermedades estomacales.
Al respecto, Eduardo Luna Cortés y Ximena de la Cruz Sandoval de Rioverde, manifestaron que abundan restaurantes y lugares de comida tanto en la zona centro como en el bulevar donde los alimentos se descomponen por las altas temperaturas y en este sentido, los dueños de estos negocios poco se preocupan por evitar que la comida se ponga agria.
Luna Cortés y Ximena Sandoval mencionaron que deberían ser más responsables los restauranteros para evitar que se enfermen del estómago.