Como de telenovela, la historia de un vecino de la colonia Bernabé Cruz Flores, quien después de haberse ausentado de su casa por años, quiso regresar y hacer como que el tiempo no hubiese pasado, sin embargo, a la llegada a su antiguo hogar, ni siquiera el perro lo reconoció, tan es así que en cuanto lo vio se abalanzó contra él y lo mordió hasta que se cansó.
Fue el pasado fin de semana cuando una mujer vecina de la colonia arriba mencionada, solicitó el apoyo de socorristas, para que le brindaran los primeros auxilios a un masculino que estaba siendo atacado por un perro y que pese a los intentos por separarlo no lo podían desprenderlo de una de las extremidades superiores del hombre.
Al sitio se trasladaron socorristas del Heroico _Cuerpo de Bomberos, quienes brindaron los primeros auxilios a un masculino identificado como José N N de 53 años, quien se encontraba alcoholizado, presentaba varias heridas en su humanidad, no solo las hechas por el can, si no porque en un abrir y cerrar de ojos se aventó a un pequeño barranco, donde se desconoce cómo, pero terminó completamente desnudo. Una vez que fue estabilizado y tras constatar que no estaba en riesgo su vida lo exhortaron a acudir al Centro de Salud, para verificar el tema de las vacunas, como deber ser cuando hay un episodio como este.
En información recabada por este medio, se supo que don José vivía en el domicilio donde fue atacado por el perro, sin embargo, hace poco más de cinco años, salió de su hogar, para ir a comprar el mandado, y ya no regresó.
Con el tiempo, los rumores empezaron a llegar a quien fuera la esposa del mencionado sujeto, de quien se omiten sus generales por obvias razones, en los que le informaban que José había conocido a una mujer mucho más joven que él con la que había formado ya otra familia y que por ese motivo no había vuelto ya al que fuera su hogar.
Aunque pareciera chiste, José no soportó el ritmo de vida que llevaba con su nueva mujer, en el sentido económico, y llegó a un punto en el que no pudo ya solventar los gastos de su joven esposa y terminó prácticamente en la calle.
La luz llegó a la mente de José y recordó que él ya tenía un hogar, entonces después de agarrar valor con la ayuda de las bebidas embriagantes, fue realizar algunas compras con los pocos pesos que le quedan en la bolsa, y regresó, mandado en mano al que por muchos años fue su vivienda.
Con lo que no contaba es con que, sería recibido por las fuertes mandíbulas de la mascota de la casa, a quien cuando se fue, dejó siendo un cachorro, de ahí que lo desconociera y le propinara tremendas mordidas.
Sin duda la vida de este hombre, es más común de lo que pudiera parecer, solo que pocas veces salen a la luz hechos como este sin embargo, en su caso, al haber ocurrido un ataque que ponía en riesgo su vida, la situación trascendió.